En la entrada anterior explicamos a grandes rasgos los cambios más importantes que acontecen en los órganos durante el embarazo. Ahora explicaremos cómo varia la postura de la madre y la relación con el crecimiento del futuro bebé en el útero. Somos KINE, una clínica de fisioterapia en Arganzuela especializada en suelo pélvico y embarazo ¡sigue leyendo!

¿Cómo cambia el útero durante el embarazo?

El útero es un órgano que está compuesto de dos partes muy diferenciadas: el cuerpo, de paredes musculares, en cuyo interior se aloja la placenta y el embrión o feto, y el cuello uterino, que tiene forma de anillo que permanece constante hasta el final del embarazo y cuya función es la de mantener al bebé en su sitio. El cuello del útero sólo se modifica al final del embarazo y durante el parto.

Hasta la semana 20 aproximadamente, el útero mantiene su forma de pera, pero a partir de este momento, se distiende adoptando distintas formas para adaptarse al crecimiento y a los cambios de posición del feto. El útero crece a lo alto y a lo ancho. En torno a los cuatro meses y medio, asciende hasta el nivel del ombligo, y progresivamente sigue subiendo por el abdomen hasta llegar prácticamente a la altura de las costillas.

Cambios posturales durante el embarazo

El crecimiento del útero presiona las vísceras y al mismo tiempo modifica el centro de gravedad del cuerpo, desplazándolo hacia delante. Para compensarlo, el cuerpo de la embarazada cambia su posición. Las piernas se separan progresivamente para aumentar la base de sustentación y el equilibrio, y la curva de la zona lumbar aumenta. La musculatura abdominal se distiende, pero si permanece fuerte (sobre todo el músculo transverso del abdomen), ayudará a mantener una postura correcta y a aliviar molestias en la espalda.

Elasticidad articular y preparación para el parto

Debido a los cambios hormonales, las articulaciones se vuelven más elásticas en todo el cuerpo, por ejemplo en los pies el arco plantar tiende a caer y el pie se ensancha ligeramente. En la pelvis, estos cambios dejan de ser anecdóticos cobrando una importancia capital. El aumento de elasticidad en las articulaciones sacro-ilíacas, favorece el descenso de la cabeza del bebé por el canal del parto. Las articulaciones de la pelvis normalmente son muy fuertes y con escasa movilidad, por lo que si no fuera de esta manera, el parto podría resultar inviable.

Estos cambios en las articulaciones, imprescindibles, suelen asociarse a dificultad para mantener una misma postura de manera prolongada, tanto de pie como sentada, y predispone al dolor lumbar durante los últimos meses de gestación.

¿Cómo prevenir molestias y favorecer un parto sin complicaciones?

La fisioterapia en el embarazo juega un papel clave. Para prevenir estas molestias, es importante mantener la musculatura fuerte y elástica durante todo el embarazo así como revisar y trabajar la elasticidad de los ligamentos implicados en el parto, mediante ejercicios suaves acompañados siempre por la respiración, y estiramientos para flexibilizar al máximo la pelvis, reduciendo las complicaciones derivadas del parto. Es importante también realizar ejercicios de fortalecimiento del suelo pélvico para evitar secuelas en el postparto, y masajes perineales durante las últimas semanas. Es recomendable tanto a nivel cardio-vascular como musculo-esquelético, realizar alguna actividad como pueda ser andar todos los días al menos 30 minutos, realizando las pausas necesarias, y practicar algún tipo de ejercicio adaptado dos o tres veces por semana, siempre siguiendo el consejo médico que evaluará si existe algún riesgo añadido.

En KINÉ ofrecemos una atención personalizada a la mujer embarazada, con tratamientos individuales y con grupos reducidos para preparar el cuerpo de la mamá. Dentro de los grupos, hacemos especial hincapié en la respiración, en la flexibilización del cuerpo y en el equilibrio y control postural. Os enseñamos posturas que favorecen la dilatación y mejoran los movimientos de la pelvis para prevenir secuelas del parto. Del mismo modo aprendéis ejercicios de fortalecimiento de suelo pélvico y os explicamos técnicas de auto-masaje perineal.